domingo, 9 de septiembre de 2012

El redescubrimiento del Hojo undo

Últimamente entre los románticos del karate-do (entre los que me incluyo) hay mucho debate e interés sobre la utilización de las herramientas tradicionales de fortalecimiento utilizadas todavía hoy en día en el karate de Okinawa y prácticamente inexistentes en el llamado karate "japonés". En foros, comentarios de facebook y otros medios se discute y debate sobre pros y contras de este entrenamiento complementario del karate. También hay muchas discusiones sobre el por qué en el karate Shotokan, y en los otros estilos desarrollados en el Japón metropolitano a principios del siglo XX, se "olvidaron" estas técnicas y métodos si es que realmente las llegaron a incorporar en sus inicios como al parecer muestran algunos documentos, a excepción del makiwara.
El libro publicado por el famoso maestro de karate Michael Clarke sobre el arte de Hojo Undo, o entrenamiento complementario al karate, ha despertado entre muchos ( bueno, en realidad, "muy pocos" si se tiene en cuenta el global de practicantes de totas las tendencias del karate actual) un creciente interés.
Se compran y fabrican herramientas (kigu undo), se inercambian opiniones y se discute si los elementos de este tipo no podrían en realidad ser sustituidos por aparatos modernos más "científicos". Algunos, como el buen amigo y experto en el estudio y la divulgación del karate histórico Víctor López Bondía, apunta con acierto que al estar específicamente diseñadas para el karate, estas herramientas no pueden ser sustituidas tan fácilmente por aparatos modernos de fitness porque el objetivo del Hojo undo del karate no es solamente "modelar" los músculos en el sentido occidental sino algo mucho más complejo. Escribo este artículo para aportar mi punto de vista sobre este tema confesando que hasta hace muy poco tiempo no me he interesado por el Hojo Undo pero que ahora siento mucho no haberlo descubierto mucho antes. En primer lugar quisiera lanzar "mi teoría" sobre el hecho de que en el Shotokan (ni al parecer en el Shito Ryu ni en otros estilos japoneses de origen oquinavés y ni siquiera en el Goju japonés (Yamaguchi)el Hojo undo y en particular las herramientas de entrenamiento de la fuerza y musculación se llegaran a implantar. Creo sinceramente, aunque no tengo pruebas, de que al menos en Shotokan, fue porque se debieron considerar como algo "anticuado" y primitivo, ya que el karate Budo perseguia objetivos más "elevados" que la simple defensa personal o la simple habilidad física. Aunque supuestamente Funakoshi y Mabuni introdujeron algunos de estos aparatos, su uso al parecer no se llegó a imponer y poco a poco caerían en el olvido a medida que el karate japonés iba derivando hacia el deporte (el makiwara es la única excepción). Por otra parte hay que reconocer que algunas de las herramientas utilizadas en Okinawa son muy originales, pero otras no los son tanto. Bajo mi punto de vista la originalidad reside más en la forma de utilización que en la estructura de la herramienta. Por poner solamente unos ejemplos el "tan" no es más que una altera de fabricación casera, con madera e hierro. Pero lo que sí es absolutamente original es la forma de utilización en el karate que nada tiene que ver con el levantamiento de peso.
Otras herramientas parecen provenir de "hechar mano" a lo que uno tuviera a su alcance para entrenar. Este sería segun mi punto de vista el caso de los sashi (en sus variantes de piedra/cemento o hierro). Esta herramiena no parecee ser más que un peso para sujetar una puerta aunque ciertamente no serviría para una puerta corredera de estilo japonés. Esto refuerza la teoría de que sashi habría sido directamente importado de China donde totavía se utiliza en el Shuai Jiao o "judo chino") y donde, por cierto, las puertas no son correderas. Aquí teneis unas capturas de un video sobre el Suaijiao que se puede ver en Youtube en el que el sashi es la herramienta principal de entrenamiento complementario.
También queda clara la adaptación de un utensilio doméstico en el caso de los nigiri-game, aunque la función concreta de fortalecer el agarre sí que es original e ingeniosa.
Las halteras de hierro que aparecen en algunas fotos de karate antiguas, no tienen nada diferente de las que utilizaban los llamados "forzudos" occidentales a finales del siglo XIX.
El kongoken sí que parece algo muy ingenioso y totalmente original, seguramente inventado en Okinawa aunque su procedencia china tampoco puede ser descartada. Otos aparatos komo kakiya, makiwara, etc parecen haberse desarrollado en Okinawa.
Hay otro dato curioso que quisiera aportar. El primer libro de karate escrito en una lengua occidental fue, que yo sepa, el publicado en 1959 por el judoka inglés E. J. Harrison. La primera edición de este libro en español es de Bruguera en 1969. Fue mi primer libro de karate (y el de muchos de mi generación). Lo compré en 1971 y empecé a practicar en 1972. Su autor avisa en el prólogo que se trata de un compendio de dos obras japonesas: Karate no Naraikata, de Reikichi Oya; y Karate-do Nyumon, publicado por la Nihon Karate kenkyukai y tarducidos y adaptados por personas que no conocían el karate. Resulta que este libro hay un capítulo completo dedicado al Hojo undo, en el que se describen todas las herramientas de fuerza y golpeo y su utilización. Cuando entré por primera vez en un dojo de karate lo único que encontré de lo que había leído en el libro fué el makiwara. Nada más. El karate japonés fue el que se introdujo en Europa y con él no llegó ya nada o casi nada de estas centenarias técnicas que ahora al parecer estan resurgiendo pero que en los estilos oquinavenses nunca han dejado de utilizarse.